Prisión preventiva para taxista acusado de abuso sexual
La audiencia terminó con un cruce de palabras y de epítetos. La mañana de ayer, 10 de abril del 2019, los familiares de Evelyn y Nicole y los parientes del taxista acusado de abusar sexualmente de las dos jóvenes se encontraron afuera de la Corte de Justicia de Pichincha, en el norte de Quito.
Ambos grupos exigían justicia, cada uno desde su perspectiva. Pedían que se conociera la verdad y que el caso se resuelva y no quede en la impunidad.
Intercambiaron sus argumentos y hasta insultos mientras en el cuarto piso de la Corte se realizaba una diligencia, que tenía como objetivo analizar si cabía levantar o no la orden de prisión preventiva que pesa contra el taxista.
Sin embrago, los abogados del sospechoso no acudieron a la diligencia. “Minutos antes de que esta se realice, los abogados del taxista presentaron un escrito con el que desistían del pedido de apelación a la prisión, pero los jueces declararon el abandono del recurso”, indicó Fabricio Mena, abogado de las jóvenes que denuncian.
De esta forma, los jueces provinciales confirmaron la orden de prisión para el sospechoso, quien actualmente se encuentra prófugo y tiene una orden de difusión roja de la Interpol.
Al ser un delito sexual, la diligencia se realizó de forma reservada, como manda la Ley. Los familiares de las dos partes tampoco pudieron ingresar a la sala de audiencias y se mantuvieron en la planta baja.
“Mi hijo no es ningún violador. Solo pedimos que se investigue a fondo”, gritaba la madre del taxista. La mujer tuvo que tomar agua, ya que sus sollozos le cortaban la respiración.
“Justicia para Evelyn, para Nicole y para todas las víctimas”, gritaban por su parte los allegados de las chicas agredidas. “No puede quedar en la impunidad un hecho tan violento”, agregaban.
Las jóvenes abusadas también acudieron a la audiencia de ayer. Nicole, quien es menor de edad, estuvo acompañada de su familia y una psicóloga. Por recomendación de la especialista, no dio declaraciones públicas.
Las denuncias
Según las versiones de las víctimas, el taxista abusó sexualmente de ellas luego de abordar su vehículo. Dijeron que fueron intimidadas con un cuchillo y que el sospechoso guardó en su celular los números telefónicos de ellas para luego amenazarlas.
Evelyn contó en su momento que el pasado 7 de septiembre tomó un taxi en Carcelén. Ella estaba atrasada para recoger varios cuestionarios para concluir con su tesis universitaria. Subió al taxi y ahí empezó su calvario, relata.
Afirmó que el conductor la amenazó con un cuchillo y, prácticamente, la convirtió en una rehén.
Ella contó a las autoridades que el taxi entró en un motel de lujo y allí, bajo amenazas, fue violada por el taxista.
A él lo describió como un hombre de mediana edad, tez blanca, ojos cafés.
Sin embargo, no fue ese el único caso denunciado en contra del taxista que, según aquellas denuncias formales, actuaba bajo esa misma modalidad.
En la Fiscalía se registran, al menos otras dos denuncias del mismo corte. Luis Alberto acusó al taxista por la violación de su nieta, de 15 años, llevada a un motel el 17 de abril del 2018. La ultrajó tres veces, reza el documento que reposa en la Función Judicial.
María Fernanda, en cambio, lo denunció por abuso sexual, debido a los hechos ocurridos el 2 de noviembre del 2015.
Ella contó a las autoridades que fue amenazada en el vehículo, pero que logró abrir la puerta del taxi y caer al suelo.
Decidió hacer tal arriesgada maniobra porque el taxista, dijo, la forzara y tocara sus partes íntimas. Una mujer la ayudó luego de lanzarse del auto; el hombre huyó.
