El ‘Nacho’ con respiración artificial
El Nacional está con las horas contadas en la Serie A. La crisis de los rojos es profunda. Tras la goleada 3-0 que le propinara Emelec en Guayaquil, el sábado, el cuco del descenso comenzó a instalarse en el complejo El Sauce, en Tumbaco.
Las escenas de los jugadores con lágrimas al finalizar el partido fueron conmovedoras. El golero Leodán Chalá fue uno de los que se quebró en llanto.
¿Está descendido? Todavía no. Hay esperanza matemática, pero necesita un cruce de resultados para llegar con vida al último partido en Machala.
El escenario está así. El rojo recibirá a Macará el jueves, a las 19:00, en el Atahualpa. Una derrota sería lapidaria y se confirmaría el descenso. Un empate podría ayudarle a mantener la esperanza siempre y cuando el Orense no gane a Independiente del Valle.
La única vía que sirve es ganar para mantenerse con opciones de seguir en la Serie A. En la última fecha, los criollos jugarán ante Orense en Machala.
Suena a milagro, pero es posible. Sin embargo, del árbol caído todos quieren hacer leña y ayer comenzó a circular una versión de un supuesto incidente entre los jugadores del club.
La presidenta del Nacho, Lucía Vallecilla, no contestó el celular hasta las 16:00 de ayer. Se espera que en el entrenamiento de hoy se conozcan más novedades sobre las decisiones.
Institucionalmente, el momento es crítico. El grupo de socios pide la convocatoria a una Asamblea y hay nerviosismo por el posible descenso. Tampoco las Fuerzas Armadas han hecho un pronunciamiento público sobre el camino que seguirá el equipo.
“Estamos organizando el tema de la Asamblea, pero hay que cumplir con todos los protocolos de seguridad que demanda tener una reunión con tanta gente. Es complicado el momento y nos duele lo que está pasando con el equipo”, dijo Washington Andrade, socio del club e impulsor de la iniciativa.
En siete días se definirá el futuro del club en la Serie A.
Aún sueña en salvarse.
