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Vida Sana
13 de marzo de 2018 13:36

El Hot Yoga equilibra y fortalece

La práctica constante del Hot Yoga permite alcanzar un equilibro emocional y físico. Foto: Alfredo Lagla / ÚN

La práctica constante del Hot Yoga permite alcanzar un equilibro emocional y físico. Foto: Alfredo Lagla / ÚN

Redacción Vida Sana

Fortalecida, equilibrada y llena de energía. Así se sentirá después de una sesión de Hot Yoga.

En una sala climatizada con paneles infrarrojos que irradian calor, Sofía Lira practica asanas clásicas del yoga, pero lo hace en un ambiente que supera los 38 grados centígrados.

La primera clase no es fácil, pues requiere de un proceso de adaptación continuo. Lira, instructora del centro Flow Hot Yoga, explica que el esfuerzo del alumno marca su avance. El yoga se adapta al cuerpo y a sus condiciones, por lo que cada clase es multinivel, de forma que si no logra la postura a la primera, podrá hacerlo en el transcurso de la sesión.

Una serie básica, por ejemplo, incluye posturas de pie donde se activan los músculos, flexiones hacia adelante, planchas y aperturas de hombros y caderas.

Así, cuando el cuerpo logra abrirse y estirarse, se pueden intentar posiciones más complejas. Si se trata de beneficios, el Hot Yoga congrega una variada lista.

A nivel energético, se logra manejar las emociones antes de actuar, se respira mejor y se reduce el estrés. Además, el calor logra acelerar el metabolismo, desintoxica, se agilita los músculos, se fortalece el cuerpo y también se pierde líquido retenido.