Cada 12 de marzo se conmemora el Día Mundial del Glaucoma, para sensibilizar sobre las consecuencias de esta enfermedad, que provoca la pérdida de la vista de millones de personas en el mundo.

Hasta hace unos años, era común que personas sobre los 50 años lleguen a la consulta oftalmológica debido a la incapacidad de ver de cerca, una anomalía llamada presbicia. Sin embargo, personas cada vez más jóvenes empiezan a padecer de esta condición.

El ritual es infalible: llegar a casa y lo primero a la vista es la pantalla de un móvil inteligente. El segundo paso es navegar incesantemente por la red social preferida y repetir el proceso por horas. O, si prefiere la lectura, agotar la noche con una tableta ¿Le suena? Y es que los mileniales y la generación Z (nacidos entre 1994 en adelante) llegaron al mundo con la huella del ecosistema digital a la orden del día.

Tras cumplir con el chequeo nutricional y deportológico, llegó la hora del chequeo audiovisual. Ese examen es de gran importancia porque permite detectar y/o corregir patologías a tiempo.

El 30% de los adultos pasa alrededor de nueve horas diarias frente a un dispositivo digital.