Haga de la cena del fin de año un placer, no una preocupación
El nuevo año se recibe de distintas maneras en cada país y las costumbres alrededor del mundo sin diversas. Algunas de las prácticas son consumir las doce uvas, el champagne, encender las luces, usar fuegos artificiales, salir a la calle con una maleta, portar ropa amarilla, entre otras.
Pero a más de todas estas actividades, no puede faltar la cena de fin de año. Todas las fiestas se engalanan con un banquete, un postre y bebidas. Pero el anfitrión usualmente es quien más se preocupa de los detalles ¿Qué preparo este año? ¿Qué puedo hacer para salir de lo convencional ¿Cómo hago un menú que no demande mucho tiempo en la cocina?
Existen varios consejos que dan los expertos para que esa noche se reciba el fin de año con la barriga llena y el corazón contento.
Los tips
Una cena debe comenzar por los ojos, por lo que la mesa debe estar decorada con cada uno de los utensilios en su lugar, copas relucientes y si es posible cubiertos de plata. Así sorprenderá a más de uno.
El ambiente
Los científicos de la Universidad de Cornell, Nueva York, y el Instituto de Tecnología de Georgia, realizaron un estudio sobre el impacto del ambiente en el número de calorías que se consumen. Los lugares con música rápida, volumen alto y decoración amarilla o roja influyen para que el comensal desee comer más.
Por lo tanto un ambiente más oscuro, con mediana iluminación, música suave y poco volumen harán que el comensal quede satisfecho e incluso con poco. Según la revista especializada Psychological Reports se puede consumir 175 calorías menos.
El jazz y el bosanova son los ritmos más recomendados, sin embargo, para el artista Jaime Proaño, la música es solo un complemento de una cena. "El éxito de la misma depende de quienes son los que se sientan en una mesa". El pianista y guitarrista citó como ejemplo las ciudades caribeñas que prefieren cenar al son de “la música tropical”.
La mantelería
A diferencia de la Navidad, esta fecha ofrece una gama más amplia de colores. Por tratarse de una fiesta en donde prima la algarabía los colores vivos son los más adecuados. La tendencia según el portal Comohacer es decorar la mesa con un camino de tela. Incluso se lo puede combinar con salvamanteles y otros materiales.
La comida
El invitado espera con ansias el plato fuerte, sin embargo, no puede faltar el aperitivo, que le da más suspenso a la espera. Se recomienda que este platillo no sea muy consistente para que el comensal pueda disfrutar del resto del menú.
Según la chef Melissa Aguilar, Para el plato fuerte, igual que la Navidad, el pavo es la primera opción sin embargo existen algunos anfitriones que prefieren preparar lechón, pollo relleno y pernil de cerdo. Como aperitivos sugiere: los canapés, los rellenos, quesos y embutidos
Las bebidas
Un vino siempre será el mejor acompañante de una cena. El 'somellier' David Torres, explica que una condición especial antes de adquirir un vino es que estos sean de barrica (barril), pues conservan un sabor más agradable para el paladar.
Existen en el mercado nacional vinos de cepas como el Merlot (Francia) y el Malbec (Argentina), y los los más dulces como tradicional francés Cabernet Sauvignon. Este último se lleva bien con una pizza, asados y carne de lechón.
Al contrario de lo que el común de las personas piensa, que el vino blanco es para carnes blancas y el tinto para carnes rojas, el sostiene que todas las carnes deben servirse con tinto ya que con los vinos se seca la boca y la grasa de las carnes actúa como lubricante dando una mejor sensación al gusto.
El vino blanco, especialmente Carmenare o el Chardonay pueden ofrecerlo al momento del brindis, para degustar un postre o bocadillos o si el plato fuerte es un pollo al horno o una lasagna.
El postre
Especialmente para cuando se consume carnes rojas, los más adecuados son las ensaladas de frutas, el mousse, el flan y el helado. Ojo, no se recomienda el pastel porque son para ocasiones especiales como cumpleaños o bodas.
Una cena perfecta dependerá mucho de si se sirve a la hora pactada, sin embargo antes y después, el ambiente debe venir acompañado por la alegría de los invitados.
El año nuevo es sinónimo de renovación por lo que se deben despojar de los malos recuerdos y disponerse a recibir el año con toda la alegría.