Bonard García tiene su revancha en el Clan Juvenil

En el cuadro de Sangolquí, Bonard García hace las veces de maestro con los pelados que no tienen tanta experiencia en la Serie A. El golero manaba se reúne con ellos al final del entrenamiento para conversar en el graderío que está a un costado de la cancha.

Entre maletas regadas y una colección de pupos al borde de campo, García hace una pausa para conversar con ÚLTIMAS. Después de tres años de militar en la Serie B, al fin volvió a la categoría de privilegio.

“Extrañaba los estadios llenos, jugar con la presión de los hinchas y pisar canchas en mejor estado”, dice el golero.

El manabita es uno de los más ‘duchos’ en el equipo y junto a Johnny Baldeón, Wilmer Zumba y los refuerzos que llegaron este año son los que guían al equipo.
Por ahora, el manaba comparte habitación con su colega Zumba. Ambos han hablado de lo que significa volver a la Serie A.

“Fue duro volver a la Serie A. Pasé tres años en Liga de Portoviejo y en la B estuve con el Clan Juvenil. Ahora, estoy orgulloso de pertenecer en una institución bien joven”, dice el exguardameta del Aucas y del Quito.

García la tiene clara. Sabe que en algún punto del año la falta de experiencia de la institución les va a jugar en contra. Pero, por ahora, todos disfrutan los manjares de la Serie A.

“En esta categoría se tiene que ser más táctico. Se actúa más rápido y con más vehemencia. Acá hay que ser un poquito más estratega y saber manejar el ritmo de los partidos”, asegura.

García respeta los procesos. Sabe que Zumba tiene ventaja en la pugna por ser titular, porque estuvo en los dos ascensos (Segunda categoría y Serie B). “Tengo que estar listo para cuando me toque. Me pican las manos por volver a atajar ante los grandes del país”, finaliza.