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22 de noviembre de 2019 10:13

Wilson dejó como recuerdo su jardín

El último jardín cosechado por Wilson Estrada, que fue atropellado el 21 de noviembre del 2019. Foto: ÚN

El último jardín cosechado por Wilson Estrada, que fue atropellado el 21 de noviembre del 2019. Foto: ÚN

Diego Bravo
(I)

Un accidente de tránsito se produjo a las 07:30 de ayer, 21 de noviembre del 2019, en la avenida Simón Bolívar, 200 metros más abajo del intercambiador que conduce a la parroquia de Nayón, nororiente de Quito. A esa hora murió atropellado Wilson Estrada, jefe de Jardinería del Colegio Johannes Kepler, mientras cruzaba esa vía.

La emergencia fue atendida por la Agencia Metropolitana de Tránsito (AMT), y lo reportó a través de sus redes sociales.

Las autoridades y estudiantes del Colegio Johannes Kepler están consternados. Recuerdan que el deceso de Estrada se produjo 1 700 metros más arriba del sitio en donde murió la madre de un estudiante del Liceo Campoverde, el pasado 6 de septiembre.

El gerente del establecimiento, Pablo Ponce, dijo que hace dos días se pintó un corazón azul en el punto donde ocurrió la muerte de la mujer y ahora lamentablemente recibió la noticia sobre la muerte de Estrada.

Acotó que se perdió a una persona muy valiosa que se encargó de embellecer al plantel con su trabajo y amor por la naturaleza.

Por ejemplo, recordó que Estrada levantó la cabaña ecológica en donde funciona la sala de reuniones del plantel. Lo hizo con caña guadua y bambú, y techo de paja.

Lo último que dejó fue un jardín multicolor con gardenias, amarantos, buganvillas y enredaderas. Ese lugar llevará su nombre para ser recordado por los padres de familia, docentes y alumnos.

La víctima vivía con sus hijos de 16 y 18 años, a quienes les preparaba el desayuno por las mañanas antes de salir a trabajar. Ahora las autoridades buscan la forma de ayudar a los chicos y, por lo pronto, el seguro que cubría a su padre será traspasado a ellos.

Tras la muerte de la madre de familia, en septiembre pasado, las autoridades del GAD Nayón, los colegios Liceo Campoverde, Johannes Kepler y T.W. Anderson, así como los representantes de 2 500 familias de esos planteles, conformaron una veeduría. Con ella solicitaron a las autoridades municipales que garanticen las seguridades en la carretera.