Villancicos hasta en Chigualo
Los villancicos de toda la vida, aquellos de los Pibes Trujillo, ya tendrán competencia en esta temporada navideña. Es que en estos días se está grabando y remasterizando una nueva tanda de canciones para el Niño Jesús.
Todo gracias al III Concurso de Villancicos Ecuatorianos que, de entre 45 participantes, eligió a 12 finalistas. Su coordinador, Antonio Godoy, cuenta que el certamen está liderado por la fundación Iglesia de la Compañía y tiene el afán de ampliar el repertorio navideño apoyándose en los géneros vernáculos, aquellos de la música tradicional ecuatoriana.
Por eso, en el nuevo CD -que se escuchará después de las Fiestas de Quito- hay desde un yaraví hasta un pasillo, albazo, yumbo, sanjuanito, aire típico, bomba, fox incaico, chigualo, andarele y tonada (ver el recuadro).
Con este trabajo se muestra, a través de sus géneros musicales, a todo el Ecuador. Y hay más, también una demostración del talento de las diferentes provincias del país, pues los compositores que llegaron a la final son de Azuay, Chimborazo, Guayas, Pichincha, Santo Domingo, entre otros rincones.
Las grabaciones se hicieron por tres vías, según la elección del propio artista. Una, la versión que los propios compositores enviaron al concurso. Dos, a través de un conjunto que se ha puesto a disposición (teclados, guitarras criollas, saxofones, percusión, bajo…). Tres, con el Coro de la Universidad Católica.
Les hubiera encantado hacerlas con la Orquesta Sinfónica Nacional, pero no hubo tanto ‘chusqui’, confiesa Godoy. En todo caso, agrega, el trabajo realizado con los recursos existentes se perfila como algo inolvidable, que realmente conmueva y alegre a las novenas que se vienen.
El asunto no queda ahí, porque de los temas finalistas se elegirán a los tres mejores. La gran final será el sábado 5 de enero del 2019. El primer lugar se llevará USD 5 000, el segundo 1 500 y el tercero, 1 000.
En el primer año de concurso quien se alzó con el primer lugar fue la compositora Paola Aranda, con su danza ‘Tierno arrullo’, y el pasado año ganó María Tejada, con su sanjuanito ‘Salve Niño de mi querer’.
Ahora resta que en las parroquias, con sus curitas y fieles a la cabeza, den una mano y pongan los discos con los nuevos villancicos, porque de tanto escuchar de ley que se pegarán los nuevos ritmos.
De hecho, “el primer CD se envió a toditas las parroquias; en algunas hubo eco y se escuchan los cantos”, cuenta el padre José Benítez, director de la iglesia La Companía (centro).
Paco Godoy, encargado de los arreglos de este III Concurso, cree que sería estupendo que ese material se distribuya a todas las arquidiócesis del país para que las difundan como se debe. Y con ello dejar, al menos por un ratito, que descansen los éxitos de los Pibes Trujillo: ‘No sé Niño hermoso’, ‘Bienvenido sea’, entre otros.
