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6 de noviembre de 2017 08:34

Esta semana será clave para el futuro de Glas

En Guayaquil, las organizaciones de la sociedad civil teatralizaron un juicio a Jorge Glas y el veredicto fue que es culpable por actos de corrupción. Foto: Mario Faustos/ ÚN

En Guayaquil, las organizaciones de la sociedad civil teatralizaron un juicio a Jorge Glas y el veredicto fue que es culpable por actos de corrupción. Foto: Mario Faustos/ ÚN

Redacción Política

Esta semana que comienza será inolvidable para el vicepresidente Jorge Glas. Y no precisamente por buenas noticias.

El miércoles se conocerá si finalmente se iniciará un juicio en su contra. Eso en el mundo judicial y penal.

Pero además, en el campo político, en la Asamblea Nacional también la oposición presentará un pedido de juicio político en su contra. A diferencia de lo que ya pasó meses atrás, esta vez incluso sus compañeros de Alianza País (no todos) creen que se lo debe poner en el banquillo de acusados para sancionarlo.

Es que como en su momento manifestó el propio presidente de la República, Lenín Moreno, cada vez más dedos apuntan al vicepresidente.

Él sigue recluido en la cárcel 4 con prisión preventiva. La Fiscalía encontró indicios de que supuestamente se asoció para cometer un delito. Todo está vinculado con el escándalo alrededor de la empresa constructora brasileña Odebrecht. La firma reconoció (y cada vez hay más pruebas) de que pagó coimas a funcionarios o emisarios de servidores del Gobierno ecuatoriano a cambio de beneficiarse por contratos del Estado.

De hecho, la misma Fiscalía dijo que para recabar más evidencias irá a Suiza.
Las autoridades suizas tienen en su poder órdenes de pago, nombres de los beneficiarios de las coimas, obras señaladas, correos electrónicos, y otros documentos del esquema montado por Odebrecht en América Latina. Son unos dos millones de documentos guardados en los sistemas denominados ‘Drousys’ y ‘MyWebDay’.

Los dos fueron creados para registrar los pagos ilícitos. La justicia suiza logró acceder tras el acuerdo de cooperación que firmó con Odebrecht. De no haberse dado ese convenio, a las autoridades les habría tomado unos 103 años acceder a los datos encriptados en el ‘Drousys’, dijo el FBI.

Las trasferencias que recibió el tío del Vicepresidente, y que constan en la plataforma informática, fueron utilizadas como un elemento para abrir
otra investigación por posible cohecho.