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27 de abril de 2018 09:36

Un mes sin respuestas claras

Amigos y familiares se reunieron en la Plaza Grande portando velas, flores. Foto: Diego Pallero / ÚN

Amigos y familiares se reunieron en la Plaza Grande portando velas, flores. Foto: Diego Pallero / ÚN

Redacción Quito
(I)

Las campanas de las iglesias del Centro Histórico de Quito empezaron a sonar simultáneamente, ayer, 26 de abril del 2018, a las 15:30, como un homenaje al equipo periodístico de El Comercio secuestrado el pasado 26 de marzo y posteriormente asesinado en la frontera norte.

El sonido de las campanas permaneció durante un minuto y medio. Monseñor Fausto Trávez, arzobispo de Quito, comentó que ese acto simbólico se realizó tras cumplirse un mes del secuestro de Javier Ortega, Paúl Rivas y Efraín Segarra.

Además, hizo un llamado para que la ciudadanía se sume a participar de la eucaristía que se cumplió a las 18:30, en la Catedral.

Allí se pidió por la paz del país y en especial se oró por los tres integrantes del equipo periodístico y por sus familias para que “encuentren consuelo”.

A las 19:00 se realizó la vigilia en la Plaza Grande, para exigir a las autoridades del Gobierno Nacional respuestas sobre las inquietudes que permanecen latentes tras el asesinato.

En ese lugar se reunieron amigos, familiares y más personas para recordarle al mundo la necesidad de recuperar los cuerpos de Efraín, Paúl y Javier y brindarles una despedida digna y a su altura. También pidieron por el breve retorno de Katty Velasco y Óscar Villacís, pareja secuestrada.

En la mañana los familiares de las tres víctimas pidieron, en una rueda de prensa, que se transparente toda la información sobre el desarrollo de las investigaciones del secuestro y posterior asesinato de sus seres queridos.