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12 de julio de 2021 17:12

Manos solidarias se suman

La elaboración de kits alimenticios se volvió más necesaria este año.

La elaboración de kits alimenticios se volvió más necesaria este año.

Ana Guerrero

El trabajo por la comunidad está intacto pese a las complicaciones por la pandemia. Y es justamente la emergencia la que ha incrementado las necesidades y, a la par, la solidaridad. Las Hermanas de la Divina Voluntad son un ejemplo de constancia.

Las religiosas viven y trabajan en la parroquia eclesiástica Nuestra Señora del Rosario del Pichincha, en el barrio La Primavera. Este es su hogar y la base para ayudar desde 1989. Ellas trabajan de la mano del sacerdote Francis Wangamati y los misioneros del Verbo Divino.

Antes de la pandemia, la parroquia ofrecía servicios como el centro de apoyo escolar, tareas dirigidas a niños de escasos, al igual que comedor para guaguas y adultos mayores de escasos recursos. No se quedaban fuera la visitas a domicilio para apoyar a las familias y para evangelizar.

Con la emergencia, esas actividades se suspendieron. Pero, como da fe la hermana Emperatriz Pilatasig, no han parado para seguir apoyando. Llegan a unas 400 familias de La Primavera, San Vicente, Vista Hermosa, Luz de Occidente, El Trigal y Pedregal.

En la congregación, además de la hermana Emperatriz, viven Camila Lanzaron, Dinora Jiménez y Magaly Naranjo.

Una vez a la semana entregan kits alimenticios a familias de escasos recursos, algunas cuyas cabezas han perdido el empleo y personas en situación de movilidad humana.

La Hermana cuenta que aún hay gente de buen corazón que les apoya con donaciones de alimentos y ropa. Y hacen ventas de empanadas, pristiños, ropa de segunda, entre otras cosas. Las personas que quieran apoyar pueden acudir a la calle Obispo Díaz de la Madrid Oe-11-369 y Gaetana Sterni, en La Primavera. Pueden ir los lunes, martes y miércoles, a partir de las 15:30. También pueden llamar: 2501979, 098 398 4348 ó 099 986 1963.

En el Carmen Bajo, en la Olmedo y Venezuela, las madres del Centro llevan una vida contemplativa. De todas formas, se dan modos para colaborar con la comunidad.

Antes de la pandemia, el sábado era el día para entregar los apoyos. Con la emergencia, no es raro la llegada de personas en busca de la colaboración.
La comunidad puede colaborar para sumar las entregas, principalmente, de alimentos. Son 10 religiosas. Y si quiere colaborar, de paso les hace el gasto, pues tienen variedad de productos, como el alcohol de eucalipto, cremas, hostias y más.

Y así como la comunidad de escasos recursos requiere alimentos y vestimenta. Tampoco está de más el apoyo legal gratuito. Por ejemplo, si se quedó sin trabajo y no le quieren pagar sus beneficios. Ahí es cuando entra en acción la Fundación Fabián Ponce Ordóñez.

Durante 33 años, los profesionales de la fundación han atendido a más de
30 000 casos. En el 2020, año de la de pandemia, atendieron más 1 570 casos de personas en situación de riesgo. Protección de derechos, solución de conflictos mediante el Centro de Mediación, capacitación y difusión de temas jurídicos y sociales relevantes. Estos son algunos de los ejes principales. La comunidad puede solicitar el apoyo legal por la web www.fundacionfpo.org/, Facebook: @FundacionFPO, Instagram: @fundacionfp y al 098 7038 229.