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7 de julio de 2020 12:11

Quito, la gran cuna del cóndor

El Distrito Metropolitano de Quito es uno de los principales hogares del cóndor andino a escala nacional. Foto: Archivo

El cóndor andino es el ave emblemática del Ecuador. Es parte del escudo. Foto: Archivo

Ana Guerrero. (I)

Majestuoso, emblema patrio, altivo, pero también amenazado. Es el cóndor andino, un ‘morador’ ilustre más del Distrito Metropolitano de Quito y que este 7 de julio del 2020 celebra su Día Nacional.

El Distrito quiteño alberga cerca de la mitad de las posibles parejas reproductivas que existen en Ecuador. Según la Secretaría de Ambiente, de las 300 áreas de hábitat en el país, 71 se encuentran en Quito, el 25% del total nacional, la mayor concentración.

En el censo 2018 de la especie se identificaron 150 individuos. Y se definió también que el 53% de la población nacional dependería de los ecosistemas alto andinos del Distrito para su reproducción.

La Secretaría detalla que nueve de los 16 nidos registrados hasta la fecha en Ecuador están dentro de los límites de Quito.

La Fundación Cóndor Andino, ha corroborado que el Distrito es el territorio con mayor concentración de cóndores en el país.

En el caso de la capital, la especie ha sido registrado en la Reserva Ecológica Antisana, en la Reserva Antisanilla, en el Área de Intervención Especial y Recuperación Pichincha-Atacazo y en la de Protección de Humedales Cerro Las Puntas. Está en páramos y zonas altas a lo largo de la cordillera de Los Andes.

Dada su experiencia, el biólogo y experto en aves, Andrés Marcayata, comparte cómo se desarrolla la maravillosa aventura que implica monitorear los nidos de la especie.

La elaboración de esos hogares es todo un reto para las gigantescas aves, pues usan peñas o formaciones rocosas, cerca de lugares donde disponen de alimento. Los cóndores son carroñeros y muchas veces compiten con perros ferales que roban su comida.

Añade que se trata de aves fieles, que tienen una sola pareja en la vida. Si esta muere, el ejemplar que queda, simplemente, no se vuelve a reproducir.

La especie alcanza la madurez sexual a los 5 o 6 años. Y tiene baja tasa de reproducción, así que con ñeque se espera que al menos ponga un huevo cada 2 años. Son de las aves más longevas, pueden alcanzar hasta 75 años en cautiverio.
Esta grandiosa ave tiene amenazas, como la pérdida de fuentes de alimento por el desarrollo de actividades humanas.

En el país, en siglos pasados, había cientos de ejemplares. Pero, la población ha ido decayendo.

Marcayata apunta que si bien en los últimos cinco años ha habido un repunte mínimo en su población, todavía hay serios peligros, como la caza.

El estado de conservación a escala global, según la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, está en la categoría Casi Amenazada. Sin embargo, a escala nacional, el Libro Rojo de las Aves de Ecuador (Granizo, 2002), clarito define que se ubica en la categoría de Peligro Crítico de Extinción.

Está protegido por tratados internacionales, por normativa municipal y hasta por el Código Orgánico Integral Penal.

Programas de conservación
En el 2013  se creó el Área de Protección de Humedales Cerro las Puntas, en el oriente de Quito.

Esa área  de protección es una de las más importantes para la reproducción, así como dormideros y refugio del cóndor andino en el Distrito y en el país.

La investigación y monitoreo en el Área de Protección de Humedales Cerro Puntas se encuentran en ejecución. Ese trabajo está liderado por el Municipio de Quito, a través de la Secretaría de Ambiente y el Fondo Ambiental con el apoyo de Fundación Cóndor Andino.

El Estado  como autoridad ambiental nacional, está en la obligación de hacer cumplir las leyes de protección de la especie y aplicar las medidas de precaución y restricción para las actividades que puedan conducir a la extinción: destrucción y alteración de los ecosistemas así como la perturbación de los sitios de anidación.