Quito sigue sin cronista oficial
Hasta el momento ningún nombre ha salido a relucir para ocupar la vacante de cronista de la Ciudad. Alfonso Ortiz fue el último quien ocupó ese cargo y presentó su renuncia el 23 de diciembre, por pedido del alcalde Mauricio Rodas.
El cronista se encarga de dirigir el Archivo Metropolitano de Historia y de promocionar la historia y las tradiciones de la capital. Asesora al Alcalde, al Concejo y a la Comisión de Asuntos Históricos.
El Alcalde tiene la facultad de designar a esa autoridad, según indica el Código Orgánico de Ordenamiento Territorial (Cootad). Está facultado para nombrar y remover a los funcionarios de dirección, procurador síndico y demás servidores públicos de libre remoción del gobierno distrital.
Hasta 1936 Quito no contaba con un cronista oficial. El primero en ser nombrado fue José Roberto Páez, quien ejerció como secretario del Concejo Municipal, en reconocimiento al trabajo realizado durante más de 10 años, y se acordó nombrarlo “Primer Cronista Vitalicio de la Ciudad de Quito, con encargo de dirigir a perpetuidad las Ediciones Históricas del Archivo Municipal, para lo cual el Concejo pondrá a su disposición los medios necesarios”.
En años posteriores dejó de nombrarse cronista. Solo en 1992 se volvió a considerar y recayó en Jorge Salvador Lara. Luego, en abril de 2011 se designó a Juan José Paz y Miño Cepeda, y en el 2014 a Ortiz.
