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19 de junio de 2017 10:01

Una fiesta a 'lo loco' se vivió en el suburbio

Abdalá Bucaram se dirigió a sus seguidores en la calle Francisco segura. Foto: Mario Faustos / ÚN

Abdalá Bucaram se dirigió a sus seguidores en la calle Francisco segura. Foto: Mario Faustos / ÚN

Redacción Política

El ‘Loco que Ama’ recibió el afecto de “la masa”. El expresidente de la República, Abdalá Bucaram Ortiz, participó el sábado en la tarde de un mitin político por su retorno al país en las calles Francisco Segura y 17, en Guayaquil.

Al estilo de su primer retorno, en el 2005, arribó a una cancha cercana en helicóptero. Luego caminó entre la multitud sudando a chorros entre decenas de banderas, respirando por la boca y saludando con el brazo en medio de cientos de simpatizantes que llenaron tres cuadras de la Francisco Segura.

El exmandatario subió sobre las 17:35 a una tarima desde la que saludaron en los momentos previos el expresidente Lucio Gutiérrez -invitado al recibimiento-, líderes de la ‘vieja guardia’ del Partido Roldosista Ecuatoriano (PRE) y las nuevas caras de Fuerza Ecuador (FE).

Su hermana Elsa lo exaltó ronca y dijo que era el “redentor del pueblo”. Minutos después, el grupo uruguayo Los Iracundos tocó Fábula y Puerto Montt, recordando las campañas de los años 90 en que acompañaron a “Loco que Ama” para ganar la Presidencia en 1996.

El líder roldosista habló sobre la política actual. “Vengo a extenderle la mano al presidente (Lenín) Moreno, es un hombre decente”, dijo en un discurso de unos 40 minutos en el que pedía le fueran marcando los temas de su intervención.

Comentó que viene “a jugar el segundo tiempo” de un partido entre el pueblo y la oligarquía. En su autoexilio en Panamá dio entrevistas en las que criticó a la Función Judicial. Bucaram enfrentó dos procesos por peculado en los recordados casos Mochila Escolar y Gastos Reservados. A los 20 años retornó tras la prescripción de los delitos.

“A mí me maltrataron como al pueblo con odio, traición y desdén”, señaló al referirse al episodio.

Al final cantó La lluvia caerá y el Rock de la cárcel junto a Los Iracundos. Y aplicó su clásica forma de cerrar sus discursos. “Y vengo a decirle a la oligarquía. ¡Y ahora, y ahora, y ahora!”, gritando casi hasta desarmarse, para regocijo de todo el público.
Los comerciantes aprovecharon para vender la guatita y el “guatallarín”, dos platillos que fueron consumidos por Bucaram.