La Policía desalojó a libadores en plazas del Centro
Sin tanto ajetreo, así amanecieron este 27 de diciembre del 2018 tres plazas del Centro de Quito: Santo Domingo, San Francisco y Plaza Grande. La presencia de un grupo de policías nacionales ahuyentó a los libadores que amanecen “a ganar puesto” en estos sitios emblemáticos de Quito.
El control comenzó en la plaza de Santo Domingo, así que a eso de las 08:00 el sitio lucía despejado, solo había dos vendedores de café y muy pocos peatones que apuraban los pasos para ingresar a la iglesia.
Las vendedoras de velas y escapularios que siempre están en el ingreso del templo de la orden dominica se alegraron con esta acción de la Policía porque, como dijo Amelia Puruncajas, la seguridad es importante para los feligreses que vienen a las misas y para los turistas que van al museo.
Cuando el patrullero de la Policía ingresó en el centro de la plaza, los libadores se fueron nomás por la sombrita. Dos jóvenes que se encontraban a los pies del monumento de Antonio José de Sucre, con una mochila, también fueron invitados a abandonar el lugar.
El mismo control se hizo en San Francisco, un lugar que a primera hora de la mañana suele estar lleno de personas en estado etílico y que ahuyentan a los transeúntes que cruzan por las calles Cuenca y Bolívar. La presencia de los uniformados fue valorada por los comerciantes del sector.
Isaac Peña, director de la librería Prensa Católica, comenta que esos controles de la Policía deben ser pan de cada día porque despachar el sitio de libadores da seguridad y garantía a los visitantes y el entorno se vuelve confiable y vistoso.
Ver tanto libador, comenta Carlos Nieto, deja una mala imagen al turista que va al Centro de la ciudad.
