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9 de noviembre de 2021 14:59

Andrés Carrión ya lleva 46 años entre ‘cuyes’ y sublevaciones

Andrés Carrión, en las cabinas de Radio Platinum y Radio Quito. Cuenta que su abuelo Benjamín Carrión influyó en su vocación. Foto: Patricio Terán / ÚN

Andrés Carrión, en las cabinas de Radio Platinum y Radio Quito. Cuenta que su abuelo Benjamín Carrión influyó en su vocación. Foto: Patricio Terán / ÚN

Redacción Últimas Noticias

El periodista Andrés Carrión cumple 46 años de trayectoria. Desde el inicio ha tenido que batirse en trifulcas, desde las reales hasta las virtuales.

Andrés, ¿cómo es que empezó tan guambrito, a los 18 años?

Blasco Peñaherra Padilla, director de noticias de Ecuavisa, reclutó a algunos jóvenes del Colegio Americano que se habían destacado en el ámbito del periodismo o de la oratoria. Por ejemplo, a Carlos Vera, Anita Granizo y a mí.

¿Y con ustedes hizo un noticiero?

Sí. Se llamaba Mesa de Redacción. El conductor principal era Polo Barriga, con Anita Granizo, y Carlos y yo éramos los reporteros.

Y todo empezó en una gran trifulca nacional…


Pues sí. Luego de que me escogieron me dijeron que iba empezar el 1 de septiembre, que era un lunes. Era 1975, yo tenía 18 años, recién salido del colegio. Fui a Canal 8, en Bellavista. Apenas llegué me indicaron que tenía que ir a Carondelet porque había un amotinamiento.

¿Qué pasó ahí?


Llegué la Plaza y había una sublevación militar. Unos corrían para un lado, otros para el otro, todo un desastre. Ahí me “gradué”. Inicié mi carrera ese 1 de septiembre que, para efectos de la historia, se llegó a llamar el 32 de agosto o la Guerra de la Funeraria.

No solo trifulcas hay en el periodismo. También hay cosas como El Club del Cuy. ¿Qué era eso?

Jaja. Esa fue una iniciativa que tuvo Santiago Proaño, gerente de Gamavisión, donde trabajé unos 12 años. Todos los últimos viernes de mes nos íbamos a Pomasqui, al Restaurante Pueblita. En esas reuniones nos servíamos cuy, pero también invitábamos a funcionarios, personalidades, políticos de alto nivel, con quienes compartíamos la comida e intercambiábamos opiniones y bromas. Del Club eran los compañeros Polo Barriga, Carlos Michelena, Ma. Judith Rosales…
Era muy agradable.

Algo quizá no tan agradable fueron las críticas en redes sociales por la pregunta que le hizo a Neisi Dajomes sobre si sabía cocinar.

Eso a mí me dolió muchísimo. Porque fue absolutamente injusto. A nadie se le puede ocurrir que yo en mis condiciones actuales de edad, de vida, pretendía con esa pregunta ofender a una mujer que nos hizo quedar tan bien.

Pero, entonces, ¿por qué se lo preguntó?

En el periodismo hay muchos recursos que se pueden usar para distender, para cambiar de tema, recursos que los uso con frecuencia en el programa que tengo en radio Platinum.

¿Se superó el asunto?

Luego de tres días que me sacaron el aire en redes, empezaron a aparecer otras notas, como una que había hecho antes al DT de la Selección, donde le pregunto lo mismo. Es decir, se veía que no era un asunto de género y eso hizo que me reivindique un poco. Pero sí resulta feo, muy triste.

Y usted, ¿sabe cocinar?

Soy pésimo, pésimo. Pero he descubierto los tutoriales del YouTube. En algunos casos me han salvado y he podio cocinar, pero en general soy muy malo, lastimosamente.

Mencionó a Platinum, la radio que, como usted, está de aniversario, está cumpliendo 25 años. ¿Cómo ha sido su experiencia en ella?


Recuerdo que hace unos 10 años la señora Guadalupe Mantilla me invitó a participar en la radio. El nuestro es un programa vespertino pensado para oyentes que regresan a casa de sus trabajos, por eso se llama Regresando con Andrés Carrión. A lo noticioso le agregamos la entrevista humana, de perfil, y hemos descubierto a los personajes desde esta mirada más íntima, más personal.

Trabajar en Platinum tiene un peso especial.

Por supuesto. Además, está hermanada con Radio Quito, emisora con tanta historia. Son radios de gran prestigio y audiencia en el país. Ahí le sigo dando para seguir en esta tarea que me conseguí hace 46 años.