Los peatones también arman el relajo vial
Sí, es verdad. Los conductores a veces irrespetan pasos cebras, veredas, semáforos, parterres, señales de tránsito, espacios públicos...
Pero la convivencia vial no solamente le compete a los conductores, sino a todos los usuarios viales.
En varios puntos de Quito también hay problemas con las imprudencias de los peatones, que no miden el riesgo al cruzar las calles sin fijarse bien en lo que ocurre en las vías.
La avenida Mariscal Sucre es una de las más transitadas del sur de la ciudad. En su intersección con la calle Huaynapalcón está el semáforo de la parada del Corredor Sur Occidental de La Magdalena.
Es una zona de mucho movimiento por lo que, además, hay varios puestos pequeños de venta de tortillas, golosinas y hasta un sitio donde arreglan relojes. Eso sin contar con los locales comerciales.
En esa parada suelen bajar y embarcar grupos grandes de gente, que aprovecha el tumulto para cruzar por la avenida sin respetar el semáforo en rojo para peatones. Ayer, 18 de marzo del 2019, un motociclista debió frenar de golpe para evitar chocarse con los transeúntes que cruzaban a la loca, sin cuidado.
Allí eso es común. Alejandro Cevallos cuenta que cuando se acerca a ese punto baja la velocidad, porque ya varias veces se ha pegado tremendos sustos y ha tenido que frenar a raya. Cuando la gente se pasa en rojo a pie, le sonríe con un gesto como pidiendo un chance. Si él pita, le aplican la ley del más bravo.
