La Marín amaneció sin ventas informales
Este 3 de septiembre del 2019 les madrugaron a los comerciantes del sector de La Marín, en el Centro de Quito. Resulta que la Agencia Metropolitana de Control (AMC) realizó un operativo para regular las ventas informales.
Desde tempranito, autoridades de la entidad municipal, de la mano de efectivos del Cuerpo de Agentes de Control, efectuaron operativos por la toma y mal uso del espacio público. Además, la Policía Nacional ayudó con personal para garantizar la seguridad en el proceso.
Estefanía Grunauer, supervisora metropolitana de control, manifestó que “han realizado alrededor de 1 200 operativos y 6 000 exhortos para que las personas no hagan mal uso del espacio público”.
De ni creer, pero la avenida Pichincha y la calle Chile lucían libres de ventas informales este martes 3 de septiembre. Estas son pan de cada día. Desde ropa, artículos de limpieza, comida, accesorios para la casa y más son parte del panorama en el sector.
Antes de los operativos de control en La Marín, desde principios de la administración del alcalde Jorge Yunda, la AMC realizó la socialización con los comerciantes informales para advertirles sobre la prohibición que existe para tomarse espacios públicos.
Iniciamos el día con la recuperación de un espacio crítico, el sector de La Marín. Con apoyo de @agentesdequito y @PoliciaEcuador intervenimos la avenida Pichincha para devolverle la tranquilidad a este sector en beneficio de la ciudad. Hacemos un #QuitoGrandeOtraVez pic.twitter.com/CPBYk4XnbD
— AMC Quito (@amcquito) September 3, 2019
Grunauer señaló que una de las alternativas que ofrece el Municipio es dotar de quioscos para que las personas trabajen de manera formal. Desde el 17 de julio hay 3 800 personas inscritas para este proyecto.
Quienes venden de manera informal en las calles y otros espacios públicos son sancionadas con el 50% del salario básico: USD 197.
Los vecinos y transeúntes del sector apoyan la acción de la AMC. Indican que es muy difícil caminar por las aceras de la avenida Pichincha o bajar desde lugares como la Plaza Grande por la calle Chile.
Una de las personas que tiene un local comercial, Juana Reinoso, señaló que es necesario un control así pues “los vendedores informales se toman las calles y quienes pagamos todos los impuestos y requisitos para poder trabajar sufrimos el impacto por las bajas de las ventas”.
Acciones. Según datos difundidos por el Municipio, en la capital ya se han realizado alrededor de 1 200 operativos y 6 000 exhortos para que las personas no hagan mal uso del espacio público.
