Madre e hija fueron asesinadas en Guayaquil
Un doble crimen se cometió a las 02:00 de este miércoles 26 de septiembre del 2018, en una urbanización privada en la vía a Samborondón, en Guayaquil. Se trató de una madre e hija que aparecieron maniatadas y asesinadas dentro de su vivienda.
La progenitora, de 68 años, vivía sola con sus dos hijas, de 26 y 30. Una de ellas sobrevivió y fue quien pidió ayuda y alertó a las autoridades aproximadamente a las 06:30.
El mayor Francisco Hernández, jefe zonal de la Dinased, confirmó que las víctimas estaban atadas y amordazadas. Detalló que en el inmueble estaba desordenado por lo que se maneja la hipótesis de un posible robo.
Sin embargo, Hernández puntualizó que durante el levantamiento de indicios, encontraron otras evidencias que abrirían otra línea de investigación que manejarán con reserva.
La vivienda donde ocurrió el hecho colinda con el patio de una unidad educativa. Un vecino, que mantuvo su nombre en reserva, comentó que los atacantes pudieron entrar por ese sitio. Según el morador, en las cámaras de seguridad se visualizó a cuatro hombres que ingresaron al inmueble.
Hernández puntualizó que a simple vista aún no se ha podido determinar una muerte violenta. Los cadáveres no registran cortaduras ni signos de violencia. Se sospecha de una asfixia por estrangulamiento, indicó Hernández, pero esto será confirmado por un médico legista.
Según el jefe policial, aún no han podido determinar un monto de robo u objetos establecidos. "La casa estaba revuelta como si buscaban algo, pero habrá que determinar qué", comentó.
Hernández confirmó que existen unos sospechosos, pero todavía no se ha determinado la vía de ingreso de ellos al domicilio. Puntualizó que a simple vista las puertas no fueron forzadas. Actualmente se encuentran agentes investigando el caso.
La sobreviviente, de 30 años, está en shock y presentaría un golpe fuerte en la cabeza, según Hernández. Ella sería la primera persona que podría dar detalles para dar con el paradero de los autores del doble asesinato. Aparentemente la sobreviviente demoró en alertar a las autoridades porque estaba también amarrada.
