Los locales duermen tarde en Carcelén
Un domingo, a las 21:00, la ciudad prácticamente duerme. En avenidas como De la Prensa, la América y la Mariscal Sucre, todos los negocios están cerrados. Pero en Carcelén, en el norte de Quito, la realidad es otra.
Cerca de 70 locales comerciales permanecen abiertos a lo largo de la vía principal y algunas secundarias. Se puede encontrar de todo: papelerías, panaderías, locales de venta de comida rápida, fruterías, tiendas que venden implementos para mascotas, copiadoras, farmacias, locales de venta de pintura y más.
Es común ver a decenas de personas caminando a lo largo de calles como la Alejandro Ponce y la República Dominicana.
Jimena Cajas atiende una panadería ubicada a una cuadra del parque central, y cuenta que uno de los días de mayor venta es el domingo en la noche.
“Mi cuñada tiene una papelería, y hay gente que viene hasta de San Carlos para comprar aquí. Saben que los locales se cierran a las 22:00”, comenta la mujer.
El domingo pasado, Juan Carlos Goyes llegó hasta uno de los bazares de la zona para comprar una tela para bordado que su hija necesitaba. Comenta que la pequeña le contó que debía llevar ese material a las 19:00, y él fue directo a Carcelén. “Esta es la única zona donde atienden hasta tan tarde. Nos salva a los padres de familia que necesitamos útiles a estas horas”, comentó.
Los dueños de los locales pidieron apoyo a la policía para velar por la seguridad.
El dato. Los moradores hacen un llamado de atención a las autoridades policiales para que refuercen los controles en las noches, para evitar asaltos y robos a transeúntes.
