6 apasionados de la escalada murieron
A Hanna Petterson, de 17 años, no le gustaba su primer nombre. Prefería que usen la versión corta del segundo: ‘Vicky’ (se llamaba Viktoria). Así la conocían en la pared de escalada de la Concentración Deportiva de Pichincha (CDP), adonde acudió cuando era apenas una niñita. Lugar al que ya no volverá jamás.
Edward Olivo, que en octubre iba a cumplir 22 años, tampoco usaba su primer nombre: en la Concentración se presentaba con el segundo: Estalin.
‘Vicky’, Estalin , Martín Cruz (quien cumplió 18 años el 16 de marzo) y Kevin Flores (23 años) eran escaladores federados por la CDP. Los jóvenes deportistas fallecieron en un accidente de tránsito en el sector Balbanera, en el cantón Colta, en Chimborazo.
Ellos viajaban junto a los montañistas Andrea Aliaga y Samir Castillo, quienes también fallecieron. Dayanara Olivo, otra deportista, está herida: presentaba una fractura de fémur y múltiples contusiones.
El grupo volvía de un entrenamiento de trepada de rocas en Cojitambo, Azogues, según relató Nancy de la Torre, secretaria de la Asociación de Escalada de Pichincha. El domingo, 21 de abril del 2019, al volver a Quito, se produjo el percance que segó prematuramente sus vidas. En el siniestro estuvieron involucrados un tráiler, un jeep (donde viajaban los deportistas) y otro automóvil.
El asfalto estaba mojado por las persistentes lluvias.
Su pasión
Martín Cruz esperaba con ansias que llegase el 7 de mayo. Aquel día estaba previsto que le entregasen su visa para viajar a Alemania para un intercambio de deportistas.
Cruz amó la escalada y el montañismo desde que era pequeño. Fue una herencia familiar: su padre Renato y su madre Leslie practicaron el ascensionismo.
María Isabel Yáñez, amiga de la familia Cruz, recuerda a Martín como un joven vital, silencioso, cariñoso con sus padres, amante de la música. Tocaba la guitarra. Estaba enfocado en hacer cursos de montaña para seguir perfeccionando su técnica. “Su relación con el deporte comenzó de pequeño. Le generaba curiosidad, pero después se convirtió en su pasión y en su vida”, añade Yáñez.
En Pichincha, hay unas 100 personas que practican escalada deportiva. El 22 de abril el dolor se apoderaba de dirigentes, deportistas, exdeportistas, familiares, entrenadores.
César Aulestia enseña en la CDP. Él, notablemente afectado, contó que participó en el proceso formativo de los cuatro escaladores fallecidos. “Estalin era una persona fuerte, un líder. Se estaba formando para ser guía de montaña. Martín era súper talentoso y estaba muy comprometido con sus entrenamientos. La Vicky era también una gran deportista. ¡Eran tan jóvenes y tenían tantos proyectos”, decía Aulestia.
Los escaladores registran medallas en Campeonatos nacionales y en Juegos Nacionales. Kevin Flores y Estalin Olivo eran parte del club de escalada de Pichincha y con sus otros amigos solían aprovechar los feriados y fines de semana para realizar entrenamientos fuera de la provincia.
“El entrenamiento en roca en Cojitambo era muy valorado por los deportistas. Les ayudaba mucho para sus siguientes competencias”, añadió De la Torre.
Capilla ardiente
Estaba previsto que desde las 18:00 del 22 de abril, los cuerpos de Cruz, Flores, Aliaga y Castillo fueran velados, en el teatro Quitumbe, en el Palacio de los Deportes de La Vicentina. ‘Vicky’ y Estalin Olivo iban a ser velados en Machachi y Riobamba.
