Collacoto, dividido por el telepeaje
Un tira y afloja comenzó entre los vecinos del barrio Collacoto, en el centro-oriente de Quito, y la Prefectura de Pichincha. Todo porque hará un par de semanas se colocaron dos pórticos en el ingreso al sector para cobrar el telepeaje en el intercambiador que está junto a la autopista General Rumiñahui.
El intercambiador se terminó de hacer en septiembre del 2016. Se hizo para evitar un giro peligroso en ‘U’ de los conductores que retornaban a Los Chillos, por la autopista. Desde esa fecha comenzaron las conversaciones para activar el peaje, que debía funcionar desde agosto del 2018.
Resultaba urgente ese cobro porque el intercambiador comenzó a mal utilizarse, ya que muchos lo usan para evadir el pago del peaje de la autopista e incorporarse a la avenida Simón Bolívar. Y la actual administración del Gobierno de Pichincha comenzó nuevamente los diálogos sobre el tema.
Cuando se levantaron los dos pórticos que faltaban, en el ingreso de Collacoto, los vecinos se dividieron. “A favor está el 90% de los 2 500 habitantes del sector”, asegura Germán Maila, presidente del barrio.
Agrega que “desde el 2012 hubo conversaciones entre la Prefectura y los moradores para realizar obras para la comunidad a cambio del peaje. “Esperamos que las obras se concreten (reformas geométricas, casa barrial, mejoramiento de calles y pasajes, etc.)”.
Considera que es necesaria la instalación del dispositivo para frenar a los evasores y para poner orden al caos vehicular que se arma en el ingreso a su barrio. Recuerda que hay muchos accidentes, incluso frente a la Escuela Lucila Santos.
Otros cuestionan el proyecto. Tania Maila menciona que el peaje no les beneficia en nada. “Aparentemente los señores (Prefectura) quieren dar obras a Collacoto, pero esa casa comunal o ampliación de vías no nos benefician”, dice. Asegura que lo que les hace falta es, por ejemplo, una línea de buses, veredas bien hechas… Aún así, afirma, “entrar y salir del barrio en taxi se encarecerá”.
El incremento en una carrera subirá, alerta el directivo de una de las cooperativas de taxis ejecutivos del sector, Wilson Ribadeneira: “… una carrera se incrementará en lo que cuesta el peaje (USD 0,39); lo mejor será rever la medida”, dice.
Ese pedido es muy difícil que se concrete. La Prefectura indica que “el proyecto, diseñado e implementado por la anterior administración, contempló el cobro del peaje, por lo cual promulgaron una ordenanza para el cobro. Es obligación para las nuevas autoridades realizar el cobro, so pena de ser observados por Contraloría”.
Cada día circulan por el intercambiador 12 000 vehículos, y el perjuicio es de USD 1 450 000 al año, por la evasión del peaje.
Fredy Maila, de las juventudes de Collacoto, menciona que los pórticos de telepeaje están justo en la Escuela Lucila Santos y eso será otro peligro; en la zona hay Guaguas Centros, 60 y Piquito, y no hay señalización, acota.
La Prefectura reitera que los vecinos de Collacoto están exonerados del pago del peaje en el intercambiador por disposición de la Ordenanza. En la lista de exonerados están barrios aledaños. Unos 3 400 vehículos, según la Prefectura, serán beneficiados.
La Prefectura continúa con el proceso de socialización de la medida. Para finales de marzo se tiene previsto iniciar el cobro.
