El aeropuerto recibe a los emprendedores
Puede encontrar casi de todo: miel pura de abeja, pan recién horneado, aguacates, maní de dulce, huevos, tostado, y más... En la tienda Nuestra Huerta, dentro del área comercial del aeropuerto Mariscal Sucre exponen sus productos los pequeños productores de las parroquias de Tababela, Pifo, puembo y Yaruquí. Todo va de la mata a la alacena.
Nuestra Huerta es un proyecto protagonizado por 16 emprendedores de la parroquia y sus familias, bajo la guía de Quiport. Las parroquias que rodean al aeropuerto son zonas donde buena parte de la población vive de lo que la tierra les da.
Allí se dan las mejores frutillas del Distrito, y hoy están al alcance no solo de las 7 000 personas que trabajan en la terminal aérea, sino de lo miles de pasajeros que todos los días circulan por el aeropuerto.
“Desde que se empezó a construir el aeropuerto vimos en él la posibilidad de sacar adelante a nuestras familias. Tenemos la confianza de que los productos serán bien recibidos por quienes nos visiten” explicó Rebeca Baquero, presidenta de la organización.
Joselo Armijos, guayaquileño, es uno de los clientes de la tienda. Asegura que la miel de abeja que veden allí no se cristaliza y que tiene un sabor especial que la hace diferente. Él viaja por cuestión de negocios cada 15 días a Quito y su esposa le encomienda cada viaje lo mismo: comprar miel.
“Así se apoya a los pequeños productores, y no de las grandes empresas que monopolizan”, comenta.
Con el proyecto ya plenamente consolidado, los productores de Nuestra Huerta conformaron una empresa comunitaria que les permite la administración de la tienda.
