Universidad Católica estuvo lleno de ‘santitos’
En Universidad Católica hay una política para hablar con los árbitros. Los más viejitos del equipo fueron los que afrontaron las situaciones difíciles en la cancha.
Facundo Martínez, capitán del equipo más limpio del Campeonato Nacional, afirma que esto fue producto de las largas charlas con los juveniles y con el cuerpo técnico.
“Jorge Célico nos recalca lo difícil que es cuando el equipo se queda con un jugador menos. Nos pide que no hagamos faltas groseras y que evitemos las amarillas tontas. Las que son por protesta o por faltas en la mitad de la cancha”, dice Martínez.
Este año, los del ‘Trencito Azul’ recibieron 90 tarjetas amarillas y cinco rojas. Es el equipo menos tarjeteado de la temporada. Es decir, hacen referencia al nombre del equipo. Como buenos católicos, siempre juegan con guante blanco.
Según el árbitro Roddy Zambrano, Católica es de esos equipos que no confrontan y que dejan trabajar en paz.
“Con Católica no he tenido problemas. En todos los equipos siempre hay un jugador complicado, pero ellos como club lo han sabido controlar”, dice Zambrano.
Martínez recalca las charlas con el grupo. Dice que a mitad de año, cuando se implementaron las nuevas normas FIFA, se reunieron todos los de la plantilla para conocer sobre esto.
El juez-chef aclara que en Católica no hay tantos malcriaditos como en otros equipos y que dejan trabajar en paz. Hacen que el juego fluya.
“Tratamos de hablar lo menos posible con los árbitros. A los jugadores más viejos nos toca esa labor de apaciguar las cosas cuando los partidos se nos van de las manos. Pero buscamos una salida más relajada y que los árbitros
no se pongan nerviosos”, dice Martínez.
Después de Católica, los más limpios de esta temporada fueron Deportivo Cuenca e Independiente del Valle.
A los morlacos les mostraron 96 tarjetas amarillas y 11 rojas, mientras que los guambras ‘rayados’ recibieron un total de 109 cartulinas (98 amarillas y 11 rojas).
Zambrano reconoce que estos equipos evitan las confrontaciones. Pero sí hay clubes que le han sacado más de una cana.
“Los de Barcelona y Emelec siempre meten presión cuando van perdiendo. No perdonan una y por lo general esos partidos se ponen calientes”, dice el manabita.
Así como hay equipos que juegan limpiecito, hay otros a los que se les va la mano. Liga de Quito, Delfín y River Ecuador fueron los más tarjeteados del año.
Entre los tres clubes sumaron 416 tarjetas. Aucas y Mushuc Runa, los dos descendidos, fueron los que más expulsados tuvieron. Seguramente, por la tensión y las iras.
