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Futbolero
20 de junio de 2018 14:47

Gastarse la plata en un Mundial

Foto: captura de pantalla

Foto: captura de pantalla

Álex Puruncajas

¡Hermanos: estoy en Rusia y ustedes, no! Esas palabras aparecieron en un cartel sostenido por uno de los miles de hinchas colombianos que acudieron al Mordovia Arena para ver en acción a su selección ante Japón.

Enseguida pensé que el hincha quería sacarle pica a sus familiares, pero también pensé en todo lo que invirtió para llegar al Mundial. Para llegar a ver un partido de primera fase, las agencias de viaje calcularon un monto de USD 5 000. Si se quería llegar a ver los tres cotejos de una selección se debía invertir cerca de USD 12 000. Para presenciar la semifinal y la final, el monto llegaba a unos USD 18 000. Y eso que las agencias avaladas por FIFA calculaban unos USD 25 000 por acudir a todo el torneo.

Con ese dinero, bien pensé que se podría invertir en un inmueble para el futuro familiar. ¿Un inmueble es más satisfactorio que vivir de cerca un Mundial?

Cuando llega este torneo, de pronto varios lo siguen de cerca. Hay un interés y una especie de satisfacción inusual que genera ver estos partidos a como de lugar.
Una amiga se volvió hincha Selección de Túnez de la noche a la mañana, tan solo con verla ante la poderosa Inglaterra. Se identificaba con el juego ordenado de los tunecinos.

En el fondo eso genera un Mundial. Cuando vemos a un equipo de cerca o, la mayoría de nosotros por la tele, queremos sentirnos en parte identificados. Vemos el fútbol para saber que hay equipos que juegan como nosotros y tal vez para entender cuáles son nuestras motivaciones de vida.