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Futbolero
10 de julio de 2017 12:01

‘Barce’ ganó un partido bien aburrido

Andrés Oña, volante del Deportivo Cuenca, intenta bloquear a Segundo Castillo, de BSC. Foto: ÚN

Andrés Oña, volante del Deportivo Cuenca, intenta bloquear a Segundo Castillo, de BSC. Foto: ÚN

Redacción Deportes


Hay algunos partidos que terminan sobrando en los calendarios de juego. Uno de estos fue el Barcelona vs. Deportivo Cuenca, jugado ayer en el estadio Monumental.

La suerte ya estaba echada para ambos. Los toreros terminaron segundos en la tabla de la primera fase. Quedaron por detrás del líder Delfín, que ya se aseguró un cupo a la final del torneo en diciembre.

Ayer hubo poquito fútbol y harto bostezo por lo mostrado por las dos oncenas en el estadio Monumental. Barcelona se impuso con el gol de Erick Castillo, el cuarto suyo en la temporada, tras una intensa galopada de Béder Caicedo, que le dejó listito de frente al arco de Hamilton Piedra.

Castillo no se desesperó, aguantó hasta que el guardameta se acostara y colocó el remate suave, para festejar la victoria.

Con este tanto, Barcelona se convirtió en el cuadro más goleador de la etapa: 36 anotaciones, uno más que los cetáceos y tres más que la Católica.

No hubo mucho más para destacar del partido. Por momentos, las pulsaciones de los futbolistas de ambos equipos estuvieron a mil y hubo empujones y posibles incidentes. Pero la cosa no pasó a mayores.

Los amarillos dominaron el partido, aunque con poca efectividad en los últimos metros. El técnico Guillermo Almada puso a su equipo de gala y volvió a encargar en Damián ‘Kitu’ Díaz las labores de creación de juego.

Pero, al igual que el pasado miércoles, el argentino anduvo perdido por la cancha. ‘Barce’ depende tanto de su talento, que cuando él no brilla, el equipo no encuentra su mejor versión. Deberá mejorar.