Aucas tuvo que esperar al final para celebrar
Los hinchas de Aucas rugían. En el último minuto del partido, su capitán, el manabita Luis Romero entró al área y recibió una falta: penal y una última esperanza para lograr ganar y asaltar al quinto puesto de la tabla.
Reinaba la algarabía y la histeria. Pese a que el cobrador oficial del equipo, designado por el cuerpo técnico es Pablo Burzio, quien tomó la pelota y se negó a aflojarla fue Maximiliano Barreiro.
La acción recordaba el partido de la cuarta fecha, cuando ‘Papá’ visitó a Delfín: Barreiro le hizo lo mismo a Burzio, quien ayer, 15 de abril del 2019, perseguía a su compañero con la esperanza de cumplir la orden del entrenador Eduardo Favaro de cobrar el tiro.
Pero ‘Maxi’, no claudicó. Se paró frente al golero Tobías Vargas, emprendió carrera y antes de llegar al balón hizo una ligera pausa para que el guardameta se ‘coma’ su amague. Luego, definió alto y desató la impotencia contenida: Aucas ganaba 2-1, en el último minuto de adición.
Con este resultado, los orientales están quintos con 16 unidades, las mismas que tiene Universidad Católica, aunque con menor gol diferencia.
Fue un triunfo esforzado del cuadro oriental que aprovechó el inicio y el final del partido para imponerse. Romero, al que le encanta ir a cabecear o buscar rebotes en el área, anotó a los 55 segundos. Parecía entonces que el partido sería un ‘coser y cantar’ para los amarillos, pero Fuerza Amarilla empató casi de inmediato: a los cuatro minutos, Héctor Penayo definió un penal.
Entonces, el partido se volvió complicado para los locales que seguían insistiendo, sin lograr someter al aguerrido rival. La Fuerza sufrió un susto con el desvanecimiento de su volante Davinson Jama, que se desvaneció en el campo, en el segundo tiempo. Sufrió un broncoespasmo. Se recuperaba en la noche.
