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Futbolero
8 de agosto de 2019 12:15

Andrés Montaño  domó a Toro y se llevó el oro

Andrés Montaño celebra su triunfo ante el colombiano Ditcher Toro. Foto: Twitter Comité Olímpico Ecuador

Andrés Montaño celebra su triunfo ante el colombiano Ditcher Toro. Foto: Twitter Comité Olímpico Ecuador

Redacción Deportes
(D)

Con la bandera de Ecuador en sus hombros y corriendo de un lado a otro, Andrés Montaño celebró una nueva medalla de oro en los Juegos Panamericanos para el país. Ayer, 7 de agosto del 2019, en el coliseo Miguel Grau del Callao, derrotó 10-1 al colombiano Ditcher Toro, en la división 60 kg.

El esmeraldeño se transformó así en el primer deportista nacional en convalidar su título panamericano. En la edición del 2015, disputada en Toronto (Canadá), también se colgó la medalla dorada.

El combate se definió rápido. Montaño aprovechó una desconcentración de su rival para someterlo en la lona. Apenas necesitó dos llaves para liquidar a su oponente.

Montaño aguantó con paciencia, hasta que llegaron los instantes precisos. Tomó a su rival por la cintura y lo elevó en dos ocasiones antes de derribarlo. Puntuó en esas dos acciones y se coronó campeón de manera fantástica.

“Fueron días duros. Me perdí los cumpleaños de mi hija y de mi madre. Por eso esta medalla es dedicada ellas”, dijo el luchador, quien ya sueña con pelear nuevamente en los Juegos Olímpicos.

Ayer, miércoles, antes de la final, dejó en el camino con algo de suerte y angustia al cubano Luis Orta, tras empatar 6-6. Los jueces le dieron el triunfo porque fue el último luchador en conseguir puntos. También derrotó al luchador venezolano Anthony Valencia.

Ante Toro ya se había enfrentado en los Juegos Sudamericanos de Cochabamba. Ahí, el esmeraldeño se impuso 8-0. Por eso cuando ambos saltaron a la zona de combate se mostraron expectantes, como si se conocieran de años.

Montaño comenzó a practicar la lucha cuando tenía ocho años. En el barrio Venecia, de Esmeraldas, se instaló un gimnasio para dar una alternativa a los jóvenes por los problemas sociales que había en las calles de ese popular sector.

Lo tomó como un juego infantil, porque “me gustaba mucho luchar”. Comenzó a entrenarse en la modalidad libre, lo hizo por cuatro años con el cubano José Rodríguez, quien retornó a su país. Conoció a César Ramón Carracedo, también cubano y con quien llegó a tener una gran conexión. Él le pidió que cambiara de la modalidad libre a la greco-romana.

Andrés tomó el desafío como un reto y le gustó. La diferencia entre ambas especialidades está en el estilo de pelea, el estilo libre se combate mayormente en el piso, el grecorromano es más de pie. “Me gustó el cambio, me canso menos que mis compañeros que hacen el estilo libre”, afirma, pero detalla que requiere de una mayor preparación física.

Sus jornadas de entrenamiento son de tres sesiones diarias, que incluyen pesas para fortalecer la musculatura y gimnasio para perfeccionar la técnica y movimientos.

Sus primeros títulos los alcanzó en los juegos escolares de su provincia, con 13 años, mientras a escala internacional fue en los Juegos Bolivarianos de Sucre 2009, donde logró el primer lugar.

Cumplió un exitoso ciclo olímpico para Río de Janeiro 2016, donde perdió en la primera ronda. En este nuevo proceso olímpico, no pudo repetir el título en los Bolivarianos 2017.

El dato. Ayer, 8 de agosto, quedó eliminado en primera ronda Cristian Rivas, quien perdió con el peruano Nilton Soto. Habían empatado 6-6 en el tiempo reglamentario y los jueces se inclinaron por el deportista local.