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Farándula
27 de marzo de 2017 09:57

Una marea negra le rinde culto a Metallica y The Strokes

El guitarrista de la banda Strokes Albert Hammond Jr se presenta en un concierto en el Festival Lollapalooza en Sao Paulo, Brasil. Foto: EFE

El guitarrista de la banda Strokes Albert Hammond Jr se presenta en un concierto en el Festival Lollapalooza en Sao Paulo, Brasil. Foto: EFE

La banda neoyorquina The Strokes rebuscó el domingo 26 de marzo del 2017 entre sus grandes éxitos en el cierre del Lollapalooza Brasil, una cita sónica marcada por el rock y que esta edición contó con grandes dosis de electrónica.

La lluvia dio inicio al concierto -uno de los más esperados del festival-, pero cesó con los primeros acordes de "Someday", un clásico indiscutible de este grupo al que muchos llegaron a considerar como "los salvadores del rock".

Nostálgicos o quizá "saudosos", como dicen los brasileños, los estadounidenses desempolvaron sus mejores temas para hacer vibrar al respetable, que saltó con Last night y Hard to explain, ambas del álbum debut de la banda Is This It (2001).

De su último trabajo, 'Future, Present Past' (2016), The Strokes, una de las bandas de garaje más icónicas del nuevo milenio, tan sólo tocó Threat of joy y Drag queen, una canción que no acabó de convencer del todo a los seguidores que abarrotaron el autódromo de Interlagos, en Sao Paulo.

El festival Lollapalooza en el autódromo Interlagos de Sao Paulo (Brasil). Foto: EFE

El festival Lollapalooza en el autódromo Interlagos de Sao Paulo (Brasil). Foto: EFE

Una marea negra le rindió el sábado 25 de marzo del 2017 culto a Metallica en la edición brasileña del Lollapalooza, un palco en el que los reyes del heavy metal volvieron a coronarse en su novena visita al país suramericano.

Los primeros acordes de rock duro sonaron quince minutos después de lo previsto y fue en ese momento cuando una multitud vestida de oscuro sacó los "cuernos" para recibir a las estrellas indiscutibles del festival, que reunió a 100.000 personas en Sao Paulo.

La banda irrumpió con The Ecstasy of gold, el clásico intro que siempre les acompaña, y la legión de seguidores, entre ellos uno puñado de niños, comenzó a agitar las cabezas, a saltar y empujarse, una escena habitual en los conciertos de la leyenda mundial del metal.

El cantante de la banda Metallica James Hetfield durante un concierto en el Festival Lollapalooza. Foto: EFE

El cantante de la banda Metallica James Hetfield durante un concierto en el Festival Lollapalooza. Foto: EFE


Tras su habitual carta de presentación, llegó el momento de mostrar a los brasileños su nuevo álbum "Hardwired... to Self Destruct", lanzado a finales de 2016 para reconquistar a sus fieles tras ocho años de sequía discográfica.

Durante las dos horas que duró el concierto James Hetfield y compañía presentaron algunas de las canciones imprescindibles de su nuevo trabajo, pero no dejaron de lado algunas de los temas que los encumbraron hasta lo más alto, como Master of puppets, Nothing Else Matters y Enter sandman, que cerró la velada.

Metallica ayudó al Lollapalooza a conseguir un público récord en el autódromo de Interlagos de Sao Paulo, pero a ello también contribuyó el cartel que le precedió y que no dejó indiferente a nadie.

Asistentes disfrutan el concierto de la banda Metallica en el Festival Lollapalooza el sábado 25 de marzo de 2017, en el autódromo Interlagos de Sao Paulo (Brasil). Foto: EFE

Asistentes disfrutan el concierto de la banda Metallica en el Festival Lollapalooza el sábado 25 de marzo de 2017, en el autódromo Interlagos de Sao Paulo (Brasil). Foto: EFE