¿Cuál es el transporte ideal para alimentos?
En momentos de emergencia, la industria alimenticia, al ser esencial, es una de las que se mantiene en pie. Por ello el transporte de alimentos ha sido una alternativa de trabajo para personas que perdieron su empleo producto de la pandemia.
La elección del vehículo adecuado para este fin es una decisión importante, que influye en la conservación de los productos y la rentabilidad de la actividad.
La empresa Teojama Comercial ofrece algunas recomendaciones al respecto. En primer lugar, se debe evaluar qué tipo de alimentos se van a transportar para tener una idea del vehículo que se requiere.
Por ejemplo, para el traslado de frutas o verduras, lo aconsejable es un camión tipo cajón de madera, con envases ecológicos para mantener los alimentos frescos.
Para alimentos no perecibles (enlatados, arroz, azúcar, entre otros), que pueden transportarse durante grandes distancias sin refrigeración, es ideal un furgón metálico. En cambio, para alimentos de corto tiempo de conservación a temperatura ambiente, como carnes y lácteos, se debe adquirir un camión refrigerado.
En caso de requerirse para entregas dentro de la ciudad, la recomendación es optar por un vehículo de carga liviana (desde 3,5 hasta 17 toneladas). Si se va a utilizar en carreteras y para transportar una mayor cantidad de productos, lo ideal es un vehículo pesado o tractocamión, cuya capacidad puede llegar hasta las 40 toneladas.
Para mantener la inocuidad de los alimentos, los vehículos y contenedores deben mantenerse limpios y en buen estado. Si se utilizan para diferentes tipos de alimentos, es posible que sea necesario desinfectar entre una carga y otra, recomienda la compañía Indiquímica en su blog.
Los precios de un transporte de carga pueden oscilar en el mercado entre USD 29 000 y 117 600, dependiendo de la capacidad y las adaptaciones. Existen diferentes facilidades de pago para adquirir este tipo de vehículos, como los créditos directos que ofrecen algunas casas comerciales.
Consejos
Adaptaciones. Dependiendo del tipo de alimentos se recomiendan adecuaciones al vehículo para proteger la integridad de los productos: repisas, cajones separadores, condiciones climáticas.
Chequeo. La revisión y chequeo diario del vehículo son necesarias para evitar inconvenientes en la ruta. Se aconseja hacer un análisis visual del exterior, revisión de llantas, frenos, luces y otros elementos.
Vigilancia. Periódicamente se debe hacer un mantenimiento técnico, para evitar averías y asegurar la productividad de la unidad. Incluye inspección de frenos, chasis, carrocería, llantas, vidrios, parabrisas y luces; medición o monitoreo de parámetros como gases contaminantes, aceite y niveles de líquidos.
