Uno de los detenidos por crimen de Emilia fue hallado muerto

José Nero fue encontrado muerto este jueves 21 de diciembre del 2017 en Centro de Rehabilitación Social de Varones de Cuenca hasta donde fue trasladado la mañana del miércoles (19 de diciembre) tras la audiencia de formulación de cargos que se desarrolló en Loja y donde se dictó prisión preventiva. Se presume que se trató de un suicidio.

El fallecido era el principal implicado en el asesinato de Emilia, la niña lojana de 10 años que desapareció del centro de la capital lojana el viernes 15 de diciembre y fue encontrada muerta cuatro días después. Su cuerpo destrozado e incinerado fue arrojado cerca de una quebrada en la vía Loja-Chuquiribamba.

A la identidad del sospechoso se conoció la noche de este lunes 11 tras la revisión de imágenes captadas por las cámaras de vigilancia de algunos negocios del centro de Loja donde se ve al sospechoso caminando con Emilia. Por eso, la Fiscalía de Loja encaminó su investigación hacia esta persona y horas después fue detenido.

De acuerdo con el informe de la Policía y que sirvió como sustento de pruebas en la audiencia de formulación de cargos que se desarrolló la madrugada del miércoles, Nero confesó el crimen. El implicado era conocido por la familia de Emilia porque a mediados de este 2017 fue instructor de bailoterapia en el barrio Ciudad Alegría, donde viven.

En su cuenta de twitter la ministra de Justicia Derechos Humanos y Cultos, Rosana Alvarado, confirmó sobre la muerte del implicado. “Se presume suicidio, sin embargo solo el informe médico legal determinará las causas del fallecimiento”, dijo.

En una rueda de prensa explicó que el sospechoso fue hallado sin vida a las 07:15 de este jueves 21 de diciembre del 2017 en el Centro de Rehabilitación Regional Sierra Sur Turi, en Cuenca.

Él ingresó al centro carcelario a las 05:30 y fue ubicado, sin esposas, en una celda junto con los otros dos detenidos por la muerte de la menor, quienes dijeron haberse dormido y que no se percataron del hecho.

Según información preliminar, el hombre se habría ahorcado con un saco, que colgó en una de las literas.

La Ministra también dijo que ayer miércoles, los tres sospechosos nunca estuvieron recluidos en la cárcel de Loja, sino que se mantuvieron esposados en oficinas administrativas de ese centro penitenciario.

Su traslado hacia el Turi se dio a la medianoche de ayer después de un informe de riesgos y para evitar que los sospechosos sean agredidos por otros internos de la cárcel de Loja, en donde ya se había conocido a noticia sobre la muerte de Emilia.

A las 08:55 ingresó el carro de la Policía de Criminalística al Centro de Rehabilitación Social de Cuenca para retirar el cadáver y trasladarlo al Centro Forense para la respectiva autopsia. El crimen de Emilia mantiene conmocionada a Loja y ha volcado el apoyo a su familia acompañando en marchas de protesta, vigilias y capillas ardientes.

La declaración de uno de los tres implicados aportó con los detalles para la ubicación, de acuerdo con las autoridades de la Policía y Gobernación de Loja.

Los restos de Emilia se encontraron en una quebrada de la vía Loja-Catamayo el pasado 19 de diciembre 400 metros de la carretera de acceso a la parroquia Chuquiribamba. Su desaparición se reportó a las 12:42 del viernes 15 de diciembre, en la esquina de las calles Bernardo Valdivieso y Lourdes, en el centro de la capital lojana.