Ya no dan más con tantos trazos feazos

Las fachadas de las viviendas y locales comerciales localizados en el barrio San José del Condado, en el norte de la ciudad, están llenas de trazos y manchones. Para los moradores del barrio esto se ha convertido en un dolor de cabeza que no tiene solución.

Cecilia Murillo vive en el sector desde hace 45 años. Asegura que este es un problema nuevo. “Antes no teníamos tanta afectación, pero ahora aquí no hay una casa o local que se salve de no ser manchado con esos garabatos”.

Su vivienda se encuentra ubicada en la calle San Francisco de Rumiurcu, vía principal de ingreso y salida al barrio. “La pintura no dura ni ocho días, por lo que tenemos que estar haciendo constantes mantenimientos cada dos meses y eso representa dinero que debe salir del bolsillo de cada propietario”, señala.

Con ella concuerda Migdalia Colmenares, quien también tiene un local comercial en esa calle. “Esto de los grafitis es una molestia y un gasto, porque si uno quiere mantener limpia su fachada debe comprar pintura a cada momento y eso no es justo”.

Según los vecinos, quienes atentan contra la propiedad privada aprovechan la oscuridad de la noche y madrugada para cometer estos actos. “Mi hijo ha encontrado en varias ocasiones a estos muchachos que dañan las paredes, les ha reclamado, pero ellos son más agresivos”, indicó.

Los moradores piden a las autoridades operativos de control continuos y sobre todo exigen sanciones.