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11 de enero de 2018 15:13

Manuela puede volver

Manuela Picq -compañera sentimental del dirigente indígena Carlos Yaku Pérez- salió de Ecuador en agosto de 2015 con destino a Brasil. Foto: archivo ÚN

Manuela Picq -compañera sentimental del dirigente indígena Carlos Yaku Pérez- salió de Ecuador en agosto de 2015 con destino a Brasil. Foto: archivo ÚN

Agencia EFE

La canciller María Fernanda Espinosa dijo este 11 de enero del 2018 que puede regresar al país la periodista franco-brasileña Manuela Picq, a quien en 2015 se le revocó el visado luego de ser detenida en unas protestas contra el Gobierno de entonces, liderado por Rafael Correa.

"Hay toda la apertura y todo el interés de resolver ese caso", dijo Espinosa en una rueda de prensa y subrayó que "Manuela Picq no tiene ninguna restricción para volver a Ecuador".

Incluso, agregó, "nos gustaría que ella retorne a nuestro país y pueda hacer una vida normal como corresponde. Será bienvenida".

El viceministro de Movilidad Humana, José Luis Jácome, indicó en la rueda de prensa que Picq "es bienvenida a Ecuador, puede ingresar cuando guste" y aseguró que como "cualquier otro ciudadano" no requiere visa durante los primeros noventa días.

"Si quiere extender su permanencia en el Ecuador, puede solicitar en la condición y categoría que ella lo desee. Puede ingresar en cualquier momento la señora Picq a Ecuador", recalcó.

Picq -compañera sentimental del dirigente indígena Carlos Yaku Pérez- salió en agosto de 2015 con destino a Brasil.

Picq, de 38 años, fue detenida el 13 de agosto de 2015 tras participar en una marcha convocada por organizaciones indígenas, sindicales y sociales contra el Ejecutivo de Correa.

La organización Human Rights Watch (HRW) denunció que Picq fue agredida por la policía cuando participaba en la manifestación y posteriormente fue retenida durante cuatro días en un hotel de Quito destinado a inmigrantes en situación irregular.

Tras la protesta, la Cancillería decidió revocar el visado de intercambio cultural otorgado a Picq, con vigencia hasta el 26 de este mes, debido a que "realizó actos que perturbaban la paz y el orden público durante las protestas del 13 de agosto".

"El Estado no la deportó, pero le negó el pedido para una nueva visa. Eso dejó a Manuela en un limbo jurídico y, por eso, decidimos traerla de vuelta", comentó el 22 de agosto de 2015, en Brasil, la letrada de la periodista, Lúcia Mallé, quien actuó junto con la Orden de Abogados de Brasil (colegio profesional).