Las FF.AA. se ponen al frente de la defensa nacional
Un cambio importante se estableció este 2 de mayo del 2018 con la posesión del general Oswaldo Jarrín al frente del Ministerio de Defensa. Los militares asumen el liderazgo de la Defensa nacional, con una visión de coordinación intersectorial.
Jarrín señaló esta mañana en La Recoleta, ante los jefes militares ahí reunidos, que se sentía motivado y seguro “de poder liderar este proyecto colectivo que significa la defensa nacional”.
Luego de 12 años de ministros de Defensa civiles, un militar en servicio pasivo se pone al frente de las FF.AA. y de la coordinación con otros sectores para “preservar la paz”, según manifestó Jarrín.
En su discurso Jarrín dijo que “la realidad es que nuestra patria necesita de protección ante numerosos cobardes atentados, que han significado el costo de la vida y de la libertad de insignes ecuatorianos en el cumplimiento de su deber profesional. Por eso creo que la confianza está en las Fuerzas Armadas que son responsables de la soberanía nacional”.
También hizo un fuerte compromiso: “Las FF.AA. harán respetar al territorio nacional, harán respetar la vida, la tranquilidad la estabilidad de la nación ecuatoriana en todos los momentos de su convivir”.
Durante los últimos graves casos que incluyeron el secuestro y asesinato de tres periodistas, el ataque y muerte de cuatro militares y el plagio de dos ciudadanos, fue el Ministerio del Interior el que asumió la vocería y, desde ese espacio, el liderazgo frente a esa problemática.
Hoy, según se desprende de las palabras de Jarrín, será Defensa el que comande las acciones.
Quizá eso explique también el perfil del nuevo ministro del Interior, Mauro Toscanini, más vinculado a la academia y a la administración que a temas de seguridad y policía, que ahora tendrá que asumir.
Toscanini, ingresó a las oficinas del Ministerio del Interior a las 09:00 de hoy. Por cerca de 20 minutos se reunió con personal de esa entidad. Luego mantuvo otra reunión con el viceministro del Interior, Andrés de La Vega.
Después de ese encuentro tenía planificado trasladarse al Palacio de Carondelet para mantener otra reunión con el presidente Lenín Moreno.
