Pasajeros: ‘La mano de Dios fue la que nos salvó’
Sintieron que los frenos del bus en el que viajaban dejaron de funcionar y elevaron una oración al cielo. Eso fue lo que hicieron los 45 pasajeros de una unidad de transporte ejecutivo que se accidentó, la tarde ayer domingo 13 de agosto del 2017, en el peaje de Oyacoto, fuera de Quito.
Según detalló el sargento José Sánchez, del Servicio de Investigación de Accidentes de Tránsito (SIAT) el bus de turismo perdió eficacia en el sistema de frenos y se impactó contra tres vehículos que se encontraban en la fila para pagar el peaje.
Los automóviles quedaron destrozados y varios ocupantes resultaron heridos por el fuerte impacto.
“Seis personas se encontraban heridas, dos de ellas estaban graves y fueron trasladadas a casas de salud, mientras que las otras cuatro fueron atendidas en el mismo lugar”, señaló el teniente de bomberos Christian Logaña.
Los pasajeros del bus, oriundos de la provincia de Manabí, bajaron despavoridos de la unidad y entre abrazos agradecían al cielo por continuar con vida. Ellos llegaron a Quito el pasado jueves 10 de agosto para participar de una convención cristiana y estaban retornando hacia su provincia.
“Salimos del Comité del Pueblo, desde ese momento sentimos que algo anda mal en el bus. Cuando empezamos a bajar nos dimos cuenta que el chofer quería maniobrar porque no le funcionaban los frenos. Ahí empezamos a rezar”, comentó Esther Flores.
Viviana Murillo viajaba con su esposo, aseguró que “la mano de Dios fue la que nos salvó de morir. Nosotros no conocíamos el camino de regreso, nos indican que esta vía no era la correcta, que debíamos ir por Alóag, pero si hubiéramos ido por allá el accidente hubiera sido mortal. Definitivamente los ángeles de Dios actuaron”.
Luego de darse ánimos los pasajeros del bus formaron una fila para poder retirar sus maletas y buscar la forma de volver a sus hogares.
