Falleció Ramón Chiriboga a los 84 años, más de medio siglo junto a la AKD

Ramoncito Chiriboga, oriundo de Yaruquí, era farmacéutico. Trabajaba en la botica Moderna, en la calle Galápagos y Guayaquil, en pleno Centro Histórico, frente al edificio en el que funcionaba las emisoras Gran Colombia.

Cerca de allí, el Quito tenía su sede deportiva. Allí empezó su idilio con el cuadro de la Plaza del Teatro, en la que prestó sus servicios hasta el final de sus días.

Fueron cinco décadas de un trabajo continuo como fisioterapeuta de la institución. Ramoncito, el hombre de las Manos mágicas que aliviaba los dolores de los futbolistas, falleció a los 84 años.

Sus restos son velados este viernes 8 de diciembre en el complejo del cuadro azulgrana en Carcelén. El fin de semana pasado estuvo en el partido que organizó Mauricio Donoso en el complejo deportivo con exglorias de la institución. Hoy tenía previsto acompañar a las ‘AKDémicas’, el equipo de baloncesto en las finales ante Leones Negros de Riobamba, pero le sorprendió la muerte.

“Tenía una vitalidad, un carisma especial. Sabía llegarle al jugador, tenía una relación cercana con los futbolistas, que confiaban en sus masajes, en sus cuidados”. La frase pertenece a Jorge Burbano, exdirectivo de la institución, consultado por este Diario. Burbano agrega: “le decían ‘el Mágico’, porque con sus manos era capaz de sanar a los futbolistas. Además, cuando había un lesionado en los partidos, él era el primero en llegar a atenderlo. Corría durísimo”, recuerda el dirigente.

Padre de la comunicadora Nebraska Chiriboga, impulsora del proyecto de Mis Bandas Nacionales, Ramoncito era un ferviente lector de ÚLTIMAS NOTICIAS, producto editorial de esta casa. Religiosamente compraba el diario todas las tardes y lo guardaba entre sus pertenencias. “Me gusta enterarme de las noticias de la ciudad y los deportes. Pero no lo saco porque por aquí me lo quitan”, confesaba en una nota a ÚLTIMAS, realizada el año pasado.

Su amigo, el periodista Gonzalo Melo, colocó algunos tuits en el que recordaba algunas facetas del trabajador del fútbol que estuvo en los cinco títulos del Quito: 1962, 1965, 2008, 2009 y 2011. Melo recordaba que Chiriboga usaba ungüentos, pomadas y agua milagrosa para curar a los futbolistas. También rememoraba que el fisio repartía raspadura entre los jugadores para elevar su energía.

Fanático de los toros y Devoto de la Virgen del Quinche, la partida de Ramoncito entristeció a exjugadores, dirigentes y exfutbolistas. Álex Aguinaga posteó una fotografía en la que aparece junto al ‘fisio’ en la temporada 1985. También lo hizo Luis Fernando Saritama, uno de sus mimados en el torneo del 2008, en el que Chiriboga lloró de la felicidad, tras 40 años sin títulos.