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Futbolero
11 de octubre de 2016 08:06

El ‘zar’ es el dueño de la pelota

Hoy, ante los bolivianos, el papel de Noboa es fundamental para que el equipo achique los espacios hacia adelante. Foto: AFP

Hoy, ante los bolivianos, el papel de Noboa es fundamental para que el equipo achique los espacios hacia adelante. Foto: AFP

Pablo Campos

Cuando se supo que Walter Ayoví no podría jugar el partido con Chile por ese dolor en el talón que no lo deja en paz, el ‘Che’ Gustavo Quinteros no tuvo dudas: el nuevo dueño de la banda de capitán era Christian Noboa.

El treintañero guayaco fue el encargado de cambiar los banderines con Claudio Bravo, el ‘capi’ de Chile. Pero, además de la representación simbólica, Noboa es un líder fundamental del equipo. No hay que solamente ser, sino también parecer, y en eso el ‘Zar’ cumple a la perfección: tras la ausencia de Ayoví pasó a ser el futbolista con más minutos en la Tri: 800, por encima de los 720 de Ayoví.

Al mediocampista solo le han sacado una vez, fue ‘hace fuuu’, en marzo ante Colombia, cuando Ecuador perdió 3-1. En el minuto 80 dejó su espacio en el medio sector para ser sustituido por Fernando Gaibor.

“Es un orgullo representar a la Selección y venir siempre al país”, cuenta cariñoso el esposo de Olga y papá de Christopher y Lucas.

Hoy, ante los bolivianos, el papel de Noboa es fundamental para que el equipo achique los espacios hacia adelante. Además, él proporciona salida limpia del balón desde el fondo. Se ubica por delante de los centrales (Arturo Mina y Luis ‘Cunti’ Caicedo) y se convierte en una aduanita; en definitiva, ¡en el dueño del balón en la Tri!

¿Cuál es la clave para el partido ante Bolivia? (15:00 en La Paz) Noboa tiene una respuesta: “hay que presionarlos desde el inicio. Debemos repetir la idea del juego con Chile. Salir a presionar desde el primer minuto. Debemos jugar de ida y vuelta y tratar de hacerlo bien”, dice el del Rostov.

En los nueve partidos de eliminatorias, Noboa ha visto desfilar a un sinnúmero de futbolistas a su lado, en el papel de volantes de primera línea: empezó Pedro Quiñónez, estuvo Segundo Castillo, pasó Carlos Gruezo (y se llevó las pifias de los aficionados). Hasta que le llegó el puesto a Jefferson Orejuela, el volante que el pueblo pedía, tras su consagratoria actuación con Independiente del Valle en la pasada Copa Libertadores. “Noboa me transmitió mucha tranquilidad”, contaba ‘Don Ore’. Su colega le devolvió las flores: “Orejuela se desenvolvió (ante Chile) sin ningún tipo de miedo. Va a ser muy importante para él seguir así”.

Hay dos cosas que aún tiene ganas el nuevo capitán de la Tricolor: la una, es hacer un gol en eliminatorias. Lo viene buscando y buscando, pero nones. Ante Argentina, Paraguay y ante Chile estrelló balonazos en los postes, por lo que se hizo acreedor al mote de ‘Rey del palo’. Lo único que hace el guayaco es reírse y menear la cabeza cada vez que mira que la pelota toca el travesaño y se va lejos.

Y, ¿cuál es la otra cosa con la que se quedó antojado el volante? Pues Noboa se quedó con ganas de torta de chocolate. El guayaco tenía lista la cucharita para entrarle al pastel de cumpleaños de Arturo Mina. Pero, claro, como el ‘Rey’ ya metió la cabeza y la melena, al pobre Noboa ya no le quedaron ganas de su pedacito ¡Otra vez será!