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En Las Aulas
13 de diciembre de 2017 10:58

¿‘¡Wow!’ o‘¡Guau!’?

Esta es una pregunta muy recurrente, no solo en el mundo de los negocios, sino en los emprendimientos. Unas pistas. Foto: INGIMAGE

Esta es una pregunta muy recurrente, no solo en el mundo de los negocios, sino en los emprendimientos. Unas pistas. Foto: INGIMAGE

Redacción En las aulas

Una de las obsesiones de muchas personas -entre los que se cuentan esa “rara especie” llamados gerentes- es lograr calidad. Y en nombre de la calidad se queman las pestañas, se desarrollan cursos a favor de la calidad total, se invierten sumas importantes que, finalmente, llegan a lo mismo. A nada. Pero, ¿qué es el “¡Wow!”? Numerosas personas lo pronuncian, y no saben de qué se trata. De momento podemos decir que es una palabra intraducible, que para algunos significa calidad; para otros, bueno, bonito y barato; y para unos terceros: “¡Guau!”, un ladrido sin sentido. En esta página intentaremos descifrar su importancia para los emprendedores.

EXCLAMACIÓN
Antecedente.
 Lo que “pinta” o “aparece” no siempre corresponde a la calidad. ¿Qué es la calidad? La calidad se parece mucho a una palabreja –o una actitud, para ser preciso- que la gente exclama cuando observa, toca o manifiesta su encanto, su sorpresa o su satisfacción. Y usted dice o escucha: “¡Wow!”.

ENERGÍA
“¿Spanglish?”.
 El “¡Wow!”, en inglés, o en español “¡Guau!”, es una voz llena de energía en el salón, la tienda o el almacén. La gente lo pronuncia en forma natural, al sorprenderse ante una innovación, una propuesta que rompe esquemas o un objeto que sale de lo común. El “¡Wow!” está en todas partes.

LECCIONES 1 y 2
Aproximación.
 Los expertos dicen que un producto o servicio se acerca a la calidad cuando es “¡Wow!”. También, cuando es “diferente” a otros que se hallan en el mercado. ¿Y cómo lograr la “diferencia” de un producto o servicio similar? No es fácil. Hay que trabajar fuerte: transpiración e inspiración son claves.

LECCIÓN 3
La “pepa”.
 ¿Es posible lograr calidad con cantidad? Se ha enseñado un equívoco: que a más cantidad menos calidad. Y esto no es cierto. Se puede masificar la producción y ofrecer calidad en bienes y servicios, con una condición: que sean “¡Wow!” ¡Qué interesante, ¿verdad?! Hay que romper esquemas. El emprendedor arriesga.

LECCIÓN 4
¿Qué no es “¡Wow!”?
 Uno de los enemigos del “¡Wow!” es el “Yo también”. En otros términos: la calidad es única, inconfundible, por el olor –si se trata de una comida o un perfume-, por la presentación o la atención, por la “diferencia”… que lo hace “¡Wow!”. El “Yo también” es la actitud general de imitación, de parecerse a...

EMPRENDEDORES
Conclusión.
 El buen empresario dice: “todo está por hacerse”. Solo falta una cosa: descubrir el “¡Wow!”. De lo contrario seguirá igual que el montón, hará lo que otros hacen, pensará lo que otros piensan… y perderá como otros pierden. Y piérdese más al decir: “Yo también”. ¿Qué es “¡Guau”? Un simple ladrido.