¡No más útiles inútiles!
En estos tiempos de crisis económica es necesario tener control sobre la adquisición de útiles escolares, cuyos precios -salvo excepciones- están en las nubes. La consigna debería ser: ¡no más útiles inútiles!
El Ministerio de Educación de Ecuador dio a conocer a los padres de familia la lista de útiles escolares 2017 autorizada para los establecimientos de educación inicial, básica y bachillerato, de la Región Sierra y el Régimen Costa, año lectivo 2017-2018. Cabe recordar -dice en Mineduc- que no se puede obligar a comprar la lista de útiles escolares en determinados lugares. ¡En esta página encontrarán algunas recomendaciones...útiles!
REQUERIMIENTOS
Punto de partida. Los denominados útiles escolares tienen como fin ayudar a enseñar y aprender. Son herramientas u objetos que usa el sistema educativo para facilitar los procesos pedagógicos, en las aulas y en los hogares. Con los útiles los chicos interactúan: los usan, los guardan, los cuidan y... pierden.
LISTAS
Autorizaciones. El Ministerio de Educación presenta a consideración de la comunidad educativa la lista oficial, para todos niveles y ciclos. Esta regulación debe ser aplicada obligatoriamente por los centros escolares públicos, municipales, privados y fiscomisionales. Esta lista está en la página web del Ministerio.
MERCADO
Compras. Cuando llega el tiempo de ir a la escuela, todos debemos prepararnos. La lista no solo incluye textos, cuadernos, lápices, cartucheras y pinturas, sino también uniformes de diario y de parada, mochilas y loncheras. El mercado ofrece alternativas, y a veces predominan las marcas y las modas.
NO A LOS ABUSOS
Útiles inútiles. Ciertos planteles escolares plantean otras obligaciones diferentes a las listas ministeriales: derechos de uso de pupitres, bibliotecas, centros de cómputo; bolsas de basura, medicamentos, resmas de papel, seguros, libros digitales. Y algo más grave: impedir la asistencia de los niños si no pagan las pensiones o no tienen uniforme.
PROHIBICIONES
Ejemplos. Las autoridades regulan y controlan la adquisición de útiles escolares. Tales disposiciones son, en esencia: la no obligación a comprar en determinados lugares, asociaciones de padres y profesores. También, el respeto de los precios asignados para libros, cuadernos y otros adminículos establecidos en las listas oficiales.